Llegaron nuevos paneles de nuestra exposición "Valdeolleros, nuestro Barrio"

 Con las cigarras tostadas a pleno sol, van llegando más paneles para nuestra exposición sobre el Barrio y nuestro Centro. Esta vez han sido los paneles dedicados a los colectivos sociales del barrio y a la Glorieta de Nuremberg.





Además, por primera vez, hemos podido poner completas y en un solo panel la exposición "Mujeres comerciantes de Valdeolleros", realizada en el marco del "Plan estatal contra la violencia de género". Seguimos construyendo, seguimos haciendo Historia.






El penúltimo graffiti en nuestra biblioteca: Guillermo, "Kalanda", se puso manos a la obra.

 














“¿PARA QUÉ ESTUDIAR MATERIAS INÚTILES?” UNA REFLEXIÓN DESDE EL MUNDO DEL ARTE EN NUESTRO INSTITUTO”

 

“¿PARA QUÉ ESTUDIAR MATERIAS INÚTILES?” UNA REFLEXIÓN DESDE EL MUNDO DEL ARTE EN NUESTRO INSTITUTO”, por Manuel García Cruz y Rafael González Requena.

Para ser antes que para producir.

Para ser tolerante, participativo, solidario.

Para tener una vida propia, y no la del sistema.

Para aprender a no discriminar a nadie.

Para poder estudiar Historia y no tener que dar explicaciones.

Para ver un cuadro blanco sobre fondo blanco.

Para escribir un poema a una persona querida.

Para que la música calme mi alma.

Para poder elegir en esta vida.

Para que mi vecino no sea mi enemiga.

Para no llamar feminazi a mi hermana y a mi madre.

Para ser demócrata.

 

El arte, la historia, el barrio de Valdeolleros. Sesiones vespertinas de aprendizaje nos han proporcionado una excusa para escribir unas líneas en defensa de todo aquello que no tiene porqué conducir a ganar mucho dinero para no sé qué ser más feliz en la vida; que no conduce a estudiar algo superproductivo, emprendedor o empresarial, sino que ocupa el centro de nuestras vidas sin saberlo. De pequeños queríamos ser artistas, toreros, futbolistas. Un par de entrevistas realizadas durante este curso nos permiten demostrar que, seguramente, estamos muy equivocados. José María Serrano y María Ortega han sido dos artistas (escultor y pintora) que han pasado por nuestro centro este curso. Sendas entrevistas realizadas por el alumnado del programa “Andalucía profundiza. Valdeolleros, nuestro Barrio” nos proporcionan un material de reflexión que no dejará indiferente a nadie. Lectura para momentos introspectivos. Comencemos.

MARÍA ORTEGA ESTEPA (Córdoba, 1983)

María Ortega Estepa es una joven pintora cordobesa que ha realizado una intervención artística en la entrada de nuestro centro dentro del programa “Impulsa” de la Junta de Andalucía. Enamorada de la naturaleza, de los tonos verdes, de la alegría de vivir desarrolla una carrera artística centrada en la actualidad en intervenciones pictóricas en los más pintorescos y variados espacios, como fachadas de edificios, colegios, centros penitenciarios, hospitales… en donde desarrolla su particular visión de arte terapia aprendido con los años. Aprovechando su trabajo en el centro, el grupo de alumnos/as del programa “Andalucía profundiza” que trabaja sobre la historia de Valdeolleros empleando las fuentes orales como documentación histórica le realizó una entrevista de la que ofrecemos un extracto en función de la temática del artículo, ¿por qué el arte?

 


 Buenas tardes, María. Después de realizar este magnífico trabajo que realza el valor de nuestro centro, una pregunta que no te habrán hecho nunca: ¿qué es el arte para ti? Supongo que me habrán hecho esa pregunta alguna vez y que respondería de manera distinta en cada situación. El arte es un tipo de diálogo, un tipo de lenguaje, con muchísimas vertientes y muy necesario para el ser humano.

 

¿Has tenido que estudiar algo específico para tu trabajo? ¿Cuál ha  sido tu formación?

Yo me formé en Bellas Artes en Sevilla. Estuve un año en Milán, en donde fui de Erasmus. Pero la formación en murales la he aprendido sola, porque allí no te dan nada en Sevilla. Hay una asignatura de aplicación mural, pero la metodología es muy antigua. Y el tema del graffiti, del spray… lo he ido aprendiendo sola. Cuando quieres algo, te averiguas las habichuelas para conseguirlo, vas probando y, sin miedo. Sobre todo, no tener miedo.

¿Cómo te sientes mientras estas pintando?

Me siento de muchos estados, porque, a lo mejor, yo puedo estar sola en mi estudio pintando un cuadro y la emoción me puede llevar incluso, a veces, a algo nostálgico, triste. Pero estoy tan a gusto trabajando, que esa es la emoción de ese día. Otro día puede ser algo más eufórico. Por supuesto, la felicidad. En el día de hoy me encuentro sorprendida, porque yo soy la primera que cuando me alejo y veo cómo ha cambiado el espacio, aunque lo hayamos hecho entre todos y la propuesta haya sido mía, soy la primera sorprendida. Ahora le decía a Manolo que parece como si no estuviera aquí. Entonces, cuando yo salgo de las obras que hago, soy la primera que me sorprendo y eso es muy bonito también.

 


¿Cómo ves el papel del artista en la sociedad actual? ¿Se puede vivir del arte? ¿Quiénes son tus mecenas? ¿Y tus clientes?

Lo veo superimportante. Muchas veces nos están cortando la manera de protesta, de comunicación. Y, además, los murales  son un objeto de denuncia muy interesante: los graffitis, las frases… Te estás moviendo en un mundo que lo cuentas por ahí, porque, si no, te meterían en la cárcel. Haces un graffiti no porque es un acto vandálico, sino porque es una herramienta para la denuncia social.

¿Por qué no te has centrado sólo en un perfil? (solo murales, solo collages, solo arte terapia….)

Va un poco por estadios. Cuando terminé la carrera era una pintora de cuadros, por así decirlo, porque no sabía entonces todo el campo que existe. Al final la vida te va colocando en determinadas fases y en algunos sitios. Ahora estoy volcada en esta parte. Como os conté esta mañana, voy a trabajar en la prisión. Estoy, sobre todo, con murales buscando la incidencia social, porque hay espacios que necesitan cambios. Y ahora mismo tengo la energía ahí porque creo que tiene que ser ahora. No sé lo que estaré haciendo dentro de cinco o diez años. Pero es la vida, las sorpresas que te va dando también.

¿Por qué usas casi siempre los mismos colores? ¿Por qué siempre paisajes?

La naturaleza es el lenguaje en el que yo me encuentro cómoda. Siempre digo que trabajo con su poética, yo no digo que traslado la naturaleza tal cual, sino que traslado lo que a mí me transmite. Y los colores no es que yo lo haga de forma premeditada, a veces ni lo pienso. Es mi gama cromática de siempre. No he estudiado para que esto funcione, sino que he ido probando y es con lo que al final yo me encuentro cómoda.



¿Por qué decidiste trabajar con Arte terapia?  ¿Cuál fue el motivo por el que empezaste a trabajar en esa línea?

Mi madre es maestra y mi padre es psicólogo. Yo he nacido en un seno familiar relacionado con la enseñanza y la terapia y siempre lo he tenido a mi alcance. Siempre he pensado que el arte tiene un poder supergrande de comunicación. Yo trabajo con personas que, a lo mejor, no se pueden comunicar verbalmente, pero a través del arte nos comunicamos. Trabajo con personas con parálisis cerebral y hay una técnica en concreto que funciona, y ves el poder que tiene trabajar con barro, trabajar con pintura, trabajar con la danza, todo lo que es el arte en su amplitud. Entonces, cuando ya he visto que existía el arte terapia, pienso que esto es lo que yo he soñado siempre, que va a funcionar. Me formé durante dos años y voy trabajando bastante también.

En tu trabajo hay una dimensión social muy importante. ¿Qué significa la incidencia del arte en la sociedad para ti? ¿Puede ayudar el arte a transformar nuestra sociedad?

El arte es una herramienta de comunicación, de comunicación de un barrio, de una persona que a lo mejor no la han dejado expresarse en su vida…

Tienes obras con los colectivos Mena, pueblo saharaui, personas adultas con discapacidad intelectual, campos de refugiados… Háblanos sobre qué te aporta el trabajo con estas personas y colectivos, normalmente marginados o discriminados en nuestra sociedad actual.

El trabajo con ellos es maravilloso siempre. Siempre aprendes algo y te ayuda mucho a empatizar, a conectar con otra persona que tiene una realidad distinta a la tuya. Te hace ver que todos somos iguales. A mí me ayuda mucho a ponerme al lado de las personas, ni arriba ni abajo.

Cómo has visto trabajar en el mundo del arte siendo mujer.

Mujer y madre, además. Como mujer es interesante, porque no se ve normalmente una mujer que maneje una grúa. Y los comentarios que hay que escuchar yo siempre me pregunto si se los harían a un hombre: “¡Chiquilla, qué te vas a caer!”, “Pero tú manejas eso” No contesto, pero me hace reflexionar mucho. Luego, no hay muchas mujeres que nos dediquemos al muralismo o al graffiti. Pasa como todo lo que ha pasado en la historia del arte con las mujeres artistas, la invisibilización. Y mucho más en el arte urbano, que se asocia a los hombres. Pero eso está cambiando. Estamos en un punto al alza. Yo estoy ahora mismo comisariando un concurso de arte urbano de mujeres, al igual que el año pasado. Y se encendió la luz y se lo comuniqué al Ayuntamiento: “Tenéis que hacer este concurso de mujeres sólo para mujeres, porque no lo hay”. Pero cada vez hay más mujeres haciendo cosas.

Y cuando eres madre, es un plus. Cuando decidí ser madre, sí que tenía claro que no quería dejar todo por lo que yo había luchado, no quería quedarme atrás, porque muchas compañeras se han quedado atrás. En mi caso personal, tengo la suerte de tener a mi lado una persona que en conciliación vamos al 50%, pero me gustaría preguntarle a las que se han quedado atrás, porqué se han quedado atrás. Yo creo que la respuesta va al revés. Para mí, este trabajo es como si fuese a la oficina. Por la mañana voy al trabajo, por la tarde voy a recoger a las niñas y así…

¿Qué ha significado esta intervención en nuestro centro para ti?

Era un reto, porque el formato era también muy diferente. Yo estoy acostumbrada a que cuando voy a centros educativos sea lo típico, muros más alargados, muros más diferentes. Pero cuando me propusieron la entrada del instituto, la verdad es que para mí fue como entre un honor y un superreto. Es como si tienes una varita mágica. Te dan este espacio y transfórmalo. Era un regalo. También venía con mi parte de nervios por si iba a funcionar o no. Luego, yo soy una persona muy segura. Y en el arte no hay que tener miedo. Hay que probar todo, porque ¿si no lo probamos en el arte, dónde lo vamos a probar? Pero reconozco que venía con mi cosilla. Pero ha sido un día maravilloso, habéis colaborado un montón. Cuando me mandaron las plantillas con lo que habíais hecho, la relación con el entorno me pareció una maravilla. Me voy muy contenta.

 


Nuestro compañero Manuel García apuntilla la declaración de María.

Esto no es decorar la fachada, sino una intervención. Lo que hemos hecho hoy no es ni una pintura mural, ni siquiera un graffiti. Hemos hecho una intervención artística porque hemos modificado un espacio que ya existía a través del graffiti o del spray, pero al final se ha producido un cambio en el entorno que yo digo que no estamos decorando, sino que estamos humanizando el espacio. ¿Por qué se humaniza el espacio? Probablemente, cuando entréis ahora o mañana, el estado de ánimo que teníais con respecto al que tenéis ahora, la situación cambia, ya sea positivo o negativo, pero cambio. ¿Qué tiene eso que ver con las emociones del ser humano? Se humanizan los espacios. Es algo mucho más grande que pintar o decorar, y eso se consigue con el arte.

Cuando tú decoras es porque habitas. Haciendo esto creo que estamos habitando y mejorando el centro un poquito más. ¿Qué opinas de habitar los sitios?

Ese sentido de habitar tiene que ver con el sentido comunitario que ha tenido la actividad. Ha habido muchas manos trabajando a la vez, ha habido mucha complicidad. Aquí hay algo más que estar pintando. Aquí hay una energía super bonita, compañerismo, una ilusión muy grande cuando habéis salido… Eso  tiene que ver con habitar, convivir… en un espacio en el que vais a venir todos los días. Muchas veces estáis aquí más horas que en vuestra propia casa. Qué menos que estéis en un ambiente agradable y que, además, lo hayáis hecho vosotros. Yo creo que ha sido un proyecto muy completo.

 


Qué duda cabe que la intervención artística de María Ortega sentará cátedra en las actuaciones plásticas dentro de nuestro centro y aportará vías a nuestros jóvenes estudiantes para que vean y sientan el arte contemporáneo.

 

JOSÉ MARÍA SERRANO (Córdoba, 1972)




José María Serrano forma parte de la investigación que realizamos dentro del proyecto “Valdeolleros, nuestro Barrio”, en concreto, a partir de su emblema escultórico del Vial de Córdoba, “Vientos de cambio” (2002). Llevábamos más de un año detrás de esta entrevista, pero el confinamiento lo truncó. Sin embargo, este pasado 13 de mayo de 2021 pudimos compartir con él toda una sesión del programa “Andalucía profundiza” en el Paseo de Córdoba, compartiendo vivencias y experiencias artísticas de las cuales sólo podemos ofrecer un pequeño fragmento en este artículo. Escultor curtido en el arte figurativo, domina la materia y el material como pocos en Córdoba, formando parte de una sugerente corriente artística denominada “Córdoba contemporánea” junto a artistas como José Manuel Belmonte, Francisco Arroyo, José Luis Muñoz, Pepe Puntas… que pudimos disfrutar en la magna exposición “Islas al mediodía” en la sala Vimcorsa el año pasado. De la amplitud de su obra, nosotros estábamos especialmente interesados en “Vientos de cambio”, su grupo en el Vial. Si en un principio esa era nuestra intención al entrevistarlo, la variedad y heterogeneidad  de temas tratados sorprenderá gratamente a nuestros lectores. Veámoslo.

Buenas tardes José María. Muy satisfechos de poder compartir esta charla con  Usted. Una pregunta que no le habrán realizado nunca ¿A quién se le llama hoy artista? ¿Por qué la escultura?

Hoy en día la palabra artista está un poco degenerada. Todo vale. Todo el mundo se siente artista. Y es muy distinto el tener oficio a no tenerlo. Yo creo que ahí está la clave. Cualquiera que se considere artista, que haga algo de la nada, para mí es un artista. Que el resultado sea mejor o sea peor, es otra cosa. Eso ya es el tiempo el que tiene que decirlo, no somos ni nosotros siquiera. Es el tiempo el que habla.



¿De dónde le viene su pasión por la escultura?

Yo no elegí la escultura, creo que la escultura me eligió a mí. A mí me encanta el arte; desde pequeño he estado dibujando, leyendo mucho, teniendo mucha relación con los cómics, con el cine, con un montón de actividades en las cuales la creatividad era importante.

¿Cómo se forma un escultor? ¿Se nace o se hace? ¿Dónde se estudia?

Hoy en día todo se relativiza. Hay quien piensa que no es necesario tener una base grande de conocimientos. Yo creo que sí. Que para ser Picasso hay que empezar a pintar como pintaba el padre de Picasso para poder llegar a hacer lo que hacía. Porque Picasso pintaba como su padre cuando tenía ocho años. Luego puedes llegar dónde quieras, pero la base la tienes que tener. Por ejemplo, si lo trasladamos a otra disciplina, la literatura, ¿entendéis que alguien que no sepa añadir un verbo a un sujeto y a un predicado puede ser escritor? Tiene que saber las reglas. ¿Qué pasaría –lo dice muy bien Rodin en su testamento- del mejor de los poetas si se va a otro país y desconociera la lengua? (…) Al principio, cuando yo empecé, creía que todos teníamos ese alma de artista, que todos éramos capaces de crear. En verdad, todos tenemos un potencial, pero no todos tenemos el mismo (…) En realidad, hoy en día cualquiera puede ser artista. Los cauces legales o más fiables son directamente la Facultad de Bellas Artes. Aquí no sólo te enseñan unas técnicas, sino una forma de ver el arte y entenderlo. Eso es lo que carecen otras disciplinas (…) Bellas Artes te ofrece un título. Por ejemplo, yo soy profesor. Luego un curso de adaptación pedagógica y puedo ser profesor. Pero ¿qué me dice ese título? Sólo que he estudiado y tengo los conocimientos básicos, que los poseo y puedo transmitirlos. Pero ¿dice que soy artista? No lo dice. No lo puede decir. Dice que tengo estudios. Que soy artista lo puede decir mi obra, mi trabajo. Hoy en día hay muchos artistas que ni han estudiado ni han estado en Bellas Artes, que se proclaman “autodidactas” (aquel que empieza algo sin tener referencias ninguna) ¿Cuántos autodidactas creéis que puede haber hoy en día? Ninguno. ¿Quién es autodidacta hoy si todo te está llenando de referencias? La mayoría de los que se llaman autodidactas no es verdad. Tienen referencias. Quieres copiar eso que has visto. Eso no es autodidacta. Autodidacta es el que está en una cueva sin tener referencia de lo que hay alrededor y empieza a trabajar y hace algo distinto. De esos veo pocos. De los otros veo muchos, que además lo que hacen es copiar lo que han visto, lo reproducen y “hay que ver que inteligencia e idea tan bonita que he tenido”

Todo artista tiene sus influencias. ¿Cuáles son las suyas?

Tengo muchas influencias, soy de mi época. Yo nací en el 72 (1972) con el auge del cine, con las películas de los ochenta (Superman, Star wars, E.T.). Muchos de mi generación decimos que llegamos antes a John Williams que a la música de Mozart (…)  Es un ir y venir. Por ejemplo, mis grandes referentes en la escultura son la época clásica, Fidias; Miguel Ángel. Para mí no hay artista más grande que Miguel Ángel.

¿Qué es la belleza (artística) para Usted?

Lo que hace que no seamos animales. Es el único punto en el que el hombre se diferencia del animal. El arte, la creatividad… Es la única razón que puede hacernos avanzar poquito a poco, pero avanzar hasta un límite. Pero poco, porque como especie estamos limitados.



¿Cómo definiría su obra?

Tengo mucha complicación a la hora de explicar esto, porque lo que a mí me gusta es no hablar de mi obra, sino que la obra hable sola. Te puedo hablar de lo que estoy haciendo, porqué lo estoy haciendo, pero una vez que la acabo la obra vive sola. Si la obra no cuenta lo que quiere, la obra no tiene sentido. Mi camino está en poder llevarla a cabo. Una vez que la termino, y la obra está en su sitio, la obra tiene que hablar sola.  Pero si te puedo decir, porque intuyo lo que me preguntas… Pero es que es complicado… No sabría decirte con claridad.

(José María) Usted divide sus producción artística en tres categorías (“Escultura”, “Homínidos” y “Obra fantástica”)  ¿Con cuál se siente más a gusto y por qué?

Las divido en tres partes porque son cosas muy claras, muy concretas. Los “Homínidos” es una serie que empecé simplemente por conocimiento, por saber, por datar (…) La otra, la de los seres fantásticos,  es conocer de dónde venimos, del momento en el que yo empecé a crecer, a leer esos libros de cine fantástico… y ese tipo de figuras es el que me mueve a mí. Cuando tengo un rato, lo que hago es una escultura fantástica porque me apetece, simplemente por gusto. Fijaros; los primeros días de la pandemia, cuando nos cerramos todos en casa, yo tenía varios proyectos. Una de las cosas que hice fue aislarme de todos esos proyectos y empecé a modelar lo que salía. Y salió un “baby Djaba”. Salió, y eso es lo maravilloso. Cuando salía con mi niño (tiene ya 17 años) me propuse hacer un dibujo cada día allí donde saliera con él. Él jugaba y yo me llevaba mi bloc y allí dibujaba. Al principio es mucho lío porque hay mucho ruido y la gente te molesta, pero luego se acostumbran y te dejan dibujar sin problemas. Y la verdad es que es increíble ese momento de creación pura. Y siempre digo que el día que no dibujo es un día perdido. Todos los días dibujo, o bien un garabato, aunque venga cansado del taller. Un dibujo tengo que hacer.

¿Se puede vivir siendo escultor hoy día en Córdoba? ¿Para quién trabaja? ¿Quiénes son sus clientes?

Muy justito. No es un mundo… Cuando vemos al artista delante de su obra pensamos que esto es un mundo idílico, que muy bien, que la fama… Pero no es eso así. Siempre cuesta más trabajo, siempre hay muchas historias. Pero, bueno, sobrevivo que no es poco, es mucho. Cuando yo salí de la facultad tenía muchos compañeros, a lo mejor de una clase de 200, cuatro o cinco se dedican a la pintura. Sólo. Así que yo me dedique a la escultura es un lujo. Además que es un lujo, es un auténtico lujo. Yo estaría pagando por hacer lo que hago. Si yo tuviera otro trabajo, pagaría. Y encima lo hago, y me pagan. Que pagan poco, bien; pero pagan. Hay veces que se gana más, y veces que se gana menos.

¿Cuáles son los principales lugares en los que ha expuesto o en dónde podemos contemplar obras suyas?

Los principales lugares en donde puedes ver obra mía es en la calle. Allí es donde me gusta más ver mi obra. Incluso las obras de imaginería, donde más me gusta verlas es en la calle. Y no os podéis ni imaginar el lujazo que es para mí pasear por aquí y ver las caras de la gente cuando ve mi obra. Porque a mí no me conocen. Me conocéis vosotros ahora mismo, pero si me quito la mascarilla no me conocéis, ni vosotros ni nadie. Yo puedo estar sentado ahí y la gente aquí, criticando la obra y yo escuchando lo que están diciendo. Es una gozada. A veces es triste, porque la gente dice cosas que no entiende, pero no es la mayoría de las veces. Cuando la gente entiende la obra, que es la gran mayoría, se nota.

¿Cómo definiría estilística y artísticamente esta obra, “Vientos de cambio”? ¿Nos puede explicar porqué el padre tiene esas dimensiones y esas características formales y el hijo otras totalmente distintas?

El padre es el superhombre que ha crecido tanto por mirarse tanto al ombligo dentro del universo, cuando no somos nada más que la hormiga. No podemos hacernos más preguntas que las que permite nuestra especie; no podemos hacernos preguntas de un ser superior, porque no lo somos. Y luego el niño es el ancla con el arte contemporáneo, que tiene la divergencia de que ahora se huye de la figuración. Se piensa que el arte contemporáneo es otra cosa. No. Para ser un artista hay que conocer lo clásico. Lo clásico es eso: el niño crecerá, se deformará, pero la base tiene que tenerla, y es esa. La base es la figuración, es la naturaleza. Recomiendo a todos que os leáis un testamento, el testamento artístico de Rodin. Yo, cuando tengo un bajón, porque los tengo. Hay veces que te comes el mundo y hay veces que el mundo te come a ti, entonces, en esos momentos, leo el testamento de Rodin, porque me corrobora que llevo razón, que voy por el buen camino. Y en ese testamento Rodin empieza por “Jóvenes que aspiráis a la belleza, la naturaleza es la única diosa”. Si os lo leéis y me mandáis algo al correo, os estaría agradecido eternamente (en otro artículo desarrollaremos todos los pequeños detalles con los que nos obsequió José María para entender esta obra)

¿Qué significó el confinamiento para un escultor como Usted? ¿Cómo ha sobrellevado este largo año? ¿Cómo cree que será la vida después de la pandemia y, concretamente, la suya como escultor?

Cuando uno crea, no crea acompañado. Los artistas creamos cada uno solos, en nuestra habitación, en nuestro taller, en nuestra casa, en nuestro estudio… Ahí es donde en verdad se crea. Te puedes inspirar en cualquier sitio, aquí con vosotros; me puede venir la inspiración de una figura, de algo. Pero donde se crea es en casa. Entonces, yo toda mi vida, en realidad, he estado confinado. Nunca he estado mal, siempre he estado bien donde estaba. Muchas veces mis amigos me llamaban y me decían “Vamos a salir, vamos a ir a tal lado” y a mí me costaba trabajo, porque estaba creando. Y me cuesta más salir que estar. Y, prácticamente, el confinamiento para mí ha sido continuar. Me ha dado la oportunidad de dejar algunas cosas paradas y poder hacer lo que quisiera, modelar y hacer una figura. Eso me lo ha permitido durante algunos meses el confinamiento. Pero estar encerrado en mi casa, para mí es lo normal. Eso no es un esfuerzo para mí.



¿Qué visión piensa que tienen las personas del arte contemporáneo en general y en Córdoba en particular?

Me hacéis unas preguntas tremendas porque necesitaría dos horas para desarrollar todo lo que tengo en la cabeza. El arte contemporáneo, por definición, está claro. Es el arte que se está haciendo en la actualidad. En el arte contemporáneo tiene cabida todo tipo de arte: desde el arte abstracto hasta el arte más figurativo o hiperrealista que pueda haber. La fotografía, ¿puede haber algo más realista? Tiene cabida todo. Qué es lo que pasa. Que hay una disyuntiva entre figuración y abstracción. Hay una pelea y es absurdo. Desde el siglo XIX cuando empiezan los impresionistas a hacer un tipo de obra que se salía de lo establecido, de lo clásico. Veníamos de una época en la que el Clasicismo, el curro, el trabajo en el estudio, el aprendiz tenía que aprender en el taller… Llegamos a un momento en el que la pintura tenía que ser un mural inmenso, figurativa, superexpresiva, colorista, muy potente, en donde la pintura parecía que había llegado a un límite de técnica. Pero llegan los impresionistas y te dan un golpe en la cara y cambian el mundo del arte. El arte tiene muchas formas, tiene muchas formas de expresar las cosas y de sentirlas. La pintura siempre está viva, porque va a depender siempre del que la mira, no del que la hace. Parece que es más importante el que mira que el que pinta. Para algunos; yo sigo pensando que no.

Todo cambia y ahora tenemos un dilema. Por ejemplo, hablando de Córdoba. Córdoba es una ciudad que es un pueblo, una ciudad pequeñita. No tiene la magnificencia que Madrid o Barcelona o Bilbao. Córdoba siempre ha estado viviendo de las tradiciones. Pero viviendo de ellas, sin apoyarlas. Una cosa es aprovecharse de tus tradiciones y otra, apoyar tus tradiciones. Aquí no se ha aprovechado la tradición, sino el vivir de ella. No se ha buscado apoyar y apostar por la cultura. Se ha intentado vivir de la cultura, no de la cultura nueva, sino de la que había. Nosotros no tenemos playa, pero vendemos cultura. Una falsa cultura. Vendemos monumentos y vendemos cosas que apoyan a los monumentos. Tenemos una Córdoba cateta. Y nos hemos acostumbrado a vivir de eso, a creer que eso es arte. Y somos unos catetos, porque nadie nos ha enseñado cuál es el arte; no ha interesado. Ha interesado que la gente viva de eso. ¿Cogéis facebook, las redes y... qué veis de Córdoba? Hoy, en mayo, flores. Pero Córdoba no es sólo eso, es muchísimo más. La cantidad de directores de cine, de artistas, de músicos que hay en Córdoba es increíble. Y no los vemos. Vemos a los dos punteros que cada político aprovecha a esos artistas que ya se han consagrado para hacerse la foto. Pero no está apoyando a los chavales que están ahí enfrente, que están estudiando porque verdaderamente le gusta la música. Que estudian cuatro años y a los cuatro años le dan una patada en el culo y le dicen “apañaros la vida, porque no tenéis espacio aquí” Y eso está pasando, es real. Dedicas cuatro años de tu vida a hacer un esfuerzo, a llevar los estudios y tus clases de instrumento, que es una barbaridad con ocho años. Y cuando ya tienes interés en verdad por la música, te cierran las puertas. ¿Eso es la música? Te pongo el ejemplo de la música porque estamos aquí al lado del conservatorio, pero te puedo poner miles de ejemplos en el campo del arte.

¿Qué le diría a jóvenes como nosotros/as para que se interesaran por el arte y la escultura?

No creo que yo os deba decir nada para que os intereséis por el arte y por la escultura, porque al que de verdad le interesa el arte, no hace falta que yo le diga nada. Solo va a surgir. Si yo te tuviese que decir algo para que te tirara de verdad este mundo, es que te falta un poquito para llegar a eso.

Pero veo por dónde va la pregunta y te voy a contestar. El mundo del arte es muy complicado. Yo no voy a ser falso. Es difícil, es muy complicado, me veis aquí como creador, estoy trabajando mucho, hasta me veis con gente famosa… Pero os he dicho que salí de la facultad y, que yo sepa, a la escultura no se ha dedicado nadie. De pintura son cuatro o cinco. El resto se ha quedado en el camino. Porque es duro, y, sobre todo, los comienzos son supercomplicados. Pero hay una cosa que no se puede evitar: cuando uno tiene la necesidad de hacerlo, da igual todos los problemas, todas las complicaciones, da igual todo. Lo he dicho muchas veces pero no lo entiendes hasta que estás en este mundo: para mí, modelar, crear, coger un lápiz… es como respirar. Yo no lo hago porque sea mi trabajo, lo hago porque necesito hacerlo. Hay mucha diferencia. No te tengo que decir nada. Lo que consigues cuando creas algo vale por todos los problemas, todas las dificultades, todas las lágrimas que has soltado en el camino, vale la pena cuando acabas la obra. Pero vale la pena de verdad. Aunque no cobres, aunque estés casi al punto de morirte al hacer la escultura, una vez que la haces la satisfacción es enorme. No os puedo decir más. Si hay ganas, no hay que desecharlo jamás.



¿QUÉ PIENSAN NUESTROS ALUMNOS Y ALUMNAS?

Debemos dejar la entrevista con José María en este apartado, pero no queremos sustraeros del coloquio que tuvimos artista-alumnos/as-profesores/as una vez terminada la misma. Fue un momento muy especial, porque rara vez un alumno/a está frente a frente con un artista consagrado y, mucho menos, dialogando afablemente entre todos nosotros. Para favorecer el coloquio, José María planteó varias preguntas al alumnado:

-          Qué pensáis que es el arte.

-          Qué pensáis que son los artistas después de haberme conocido a mí.

-          Qué te gustaría hacer y qué crees que vas a ser en el futuro.

Y este es el resultado.

David Segura: “A mí me gustaría ser, en primer lugar, buena persona; y después, como trabajo, policía”

Javier Fernández: “Yo quiero ser profesor y creo y quiero que lo puedo hacer… Yo pienso que el arte está muy infravalorado en la actualidad. Se tiene que dar más en los institutos. Es una cosa esencial para la vida”

Paula Cordón: “A mí me gustaría ser profesora de Primaria y pienso que el arte es una forma que tienen las personas de comunicarse. Hay personas que no entienden este lenguaje, pero si nos esmeramos un poco, podemos observar que es muy bonito”

Irene Castro: “Desde que pasaba de pequeñita por aquí, lo primero que me llamaba la atención es que el Señor es muy grande. Después de la entrevista me ha quedado más claro lo que querías expresar. El arte nos quiere decir muchas cosas, pero la gente interpreta el arte de diversas formas. A mí siempre me ha gustado el arte, la música; es mi arte preferido… Me gustaría ser veterinaria porque desde muy pequeña he tratado con animales y me gustan mucho; cuando voy al campo o a algún lugar en donde hay animales, me encanta estar rodeado de ellos”

Esther Sanz: “A mí de mayor me gustaría ser notaria, para ganar bastante dinero y no quedarme en la ruina, y mantener a mis padres si tienen algún problema económico. Antes de ser notaria, a lo mejor paso por una fase de ser niñera… [Si tuvieses todo el dinero del mundo y no tuvieras una preocupación económica] a lo mejor sería artista. Eso es lo que tienes que tener claro. Haz lo que tu corazón te diga. Sé feliz (José María)”

Alba Jiménez: “A mí me gusta como el artista refleja sus sentimientos en su obra”

Marcos Ríos: “Yo no me vería capaz de transmitir un mensaje o lo que siento en un momento en una escultura, en una pintura, en un dibujo. Creo que los que se dedican al arte son personas honorables, ya que el hecho de transmitir un mensaje en un papel no lo tiene cualquiera… Tienes que nacer para eso, para poder triunfar”

Manuel García: “Me gusta saber mucho sobre el papel del arte en la educación. A lo largo del tiempo me he tenido que ir construyendo la idea importante de enseñar arte o no. Y esa importancia mucha gente (los compañeros, la familia…) lo canaliza mal enfocándolo sólo desde la utilidad. ¿Eso para qué sirve? ¿Para qué sirven unas asignaturas?, para qué sirven otras asignaturas analizando vuestro futuro. Sin embargo, de lo que se trata es de amueblaros vuestra cabeza. Todo el mundo escucha música. Habrá que plantear para qué sirve. Lee libros, ve series. No sé. Vosotros ¿qué pensáis sobre estudiar cosas inútiles?”

Lucía Jiménez: “Porque en un futuro no te van a servir para nada. Por ejemplo, en la carrera que yo quiero hacer, de qué me sirve saber una función cuadrática. ¿Para qué te sirve escuchar música? (Manuel). Para tranquilizarme, para concentrarme, para encontrar mi yo interior. Entonces, ¿tienes que estudiar música? Bueno, es que esa es la carrera que yo quiero hacer.

“Yo tenía un profesor de latín y una vez un alumno le preguntó que para que servía estudiar latín. El profesor le contestó que, para ser de Cabra, le servía para tener un gentilicio un poco más decente” (José María Serrano)

“Nada de lo que estudiamos es inútil. Por ejemplo, en Plástica recuerdo una vez que ese edificio que tenemos ahí antes ha tenido que ser dibujado, y para eso sirve la Plástica. Música, todo el mundo escucha música. Todas las asignaturas que damos en el colegio nos van a servir en un futuro para algo” (Paula Cordón)

“Todo lo que aprendemos no es que sea inútil, todo nos sirve para culturizarnos más o menos, pero lo que tú tienes, algunas cosas te gustan más y otras menos. Pero por lo menos, las que no te gustan ya las tienes aprendidas. Y ya te quedas con lo que verdaderamente te importa, lo desarrollas y lo llevas a tu área” (Irene Castro)

“¡Hombre José María, que me han dicho que eres artista! Pero, a qué te dedicas. Ves, por eso nos llevábamos tan mal. No entendía que disfrutar en tu trabajo, podía ser un trabajo. ¿Es que hay que ir a sufrir a un trabajo? Pues no. Esa profesora me dijo a mí, en mi cara, que no iba a ser nunca nada en la vida, que iba a ser un fracaso como persona. A lo mejor como persona sí, pero como artista no” (Una profesora de José María a José María en la reunión de los 25 años en el Instituto Góngora)

Alba Jiménez: “Yo pienso que de pequeños no sabemos todavía lo que nos gusta y el trabajo no lo tiene tan claro (José María lo niega: “Sí que lo tenéis”). Lo que sí sé es que con lo que nos enseñáis la gente lo tiene más claro. Si tú no has dado Geografía e Historia, no vas a saber lo que te gusta realmente. “Sirve para darte referencias” (José María Serrano)

En fin, como se ha demostrado en las páginas precedentes, hada es inútil, especialmente la experiencia artística. Y, para concluir, qué escribió Auguste Rodin en su testamento artístico para ser referente vital y plástico para los jóvenes que quieren dedicarse al arte. Aquí tenéis un fragmento. Disfrutar con su lectura.

 

“TESTAMENTO A LOS JÓVENES CREADORES” DE AUGUSTE RODIN

“Jóvenes que quieren ser oficiantes de la belleza, quizá les guste encontrar aquí el resumen de una larga experiencia.

Amen devotamente a los maestros que les precedieron. Inclínense delante de Fidias y de Michelangelo.

Admiren la divina serenidad de uno, la brutal angustia del otro. La admiración es un vino generoso para los espíritus nobles.

Cuídense, sin embargo, de imitar a sus mayores.

Respetuosos de la tradición, sepan discernir lo que ella encierra de eternamente fecundo: el amor a la Naturaleza y la sinceridad. Éstas son las dos fuertes pasiones de los genios (…)

EI arte no es más que sentimiento. Pero sin la ciencia de los volúmenes, de las proporciones de los colores, sin la dirección de la mano, el sentimiento más vivo se paraliza. ¿Qué llegará a ser el gran poeta en un país extranjero del que ignora la lengua? En la nueva generación de artistas, hay un número de poetas que, desgraciadamente, rechazan aprender a hablarla. Por eso no hacen más que balbucear.

¡Paciencia! No cuenten con la inspiración. No existe. Las únicas cualidades del artista son sensatez, atención, sinceridad, voluntad. Realicen su tarea como obreros honestos.

Sean verdaderos, jóvenes. Pero eso no significa que sean meramente exactos. Hay una exactitud de base: la de la fotografía y la del vaciado. EI arte no comienza más que con la verdad interior. Que todas sus formas, todos sus colores, traduzcan sentimientos (…)

EI gran punto es conmoverse, amar, esperar, estremecerse, vivir. ¡Ser hombre antes que ser artista! La verdadera elocuencia se burla de la elocuencia, decía Pascal. EI verdadero arte se burla del arte (…)

No pierdan su tiempo en anudar relaciones mundanas o políticas. Verán a muchos de sus compañeros arribar por la intriga a los honores y a la fortuna: no son verdaderos artistas. Algunos entre ellos son, sin embargo, muy inteligentes y si ustedes emprenden la lucha con ellos sobre el mismo terreno, consumirán tanto tiempo como ellos mismos, es decir, toda su existencia: no les quedará entonces más de un minuto para ser artistas. Amen apasionadamente su misión. No hay en ella más belleza (…)

EI verdadero artista expresa siempre lo que piensa a riesgo de atropellar todos los prejuicios establecidos. Enseña así la franqueza a sus semejantes. Ahora bien, ¡imaginemos qué maravillosos progresos se realizarían de pronto si la veracidad absoluta reinara entre los hombres!

¡Ah, qué rápido se libraría la sociedad de los errores y las bajezas que habría confesado y con qué rapidez nuestra tierra se volvería un Paraíso!”

 




 

 

 

 

 

 

 

"HABÍA UNA VEZ"

 

“HABÍA UNA VEZ”

Alumnado de PMAR de 3º de la E.S.O. y profesores/as del proyecto “Vivir y sentir el patrimonio.



“¿Qué es el patrimonio?”,  “¿Qué es el arte?”, “¿Es el Instituto un recurso patrimonial?”, “¿Y el barrio?” son preguntas recurrentes que nos hemos formulado en el proyecto “Vivir y sentir el patrimonio” antes de empezar a trabajar. Muchas veces existe una confusión de términos, otras una identificación... Una primera intención en el trabajo a realizar consistió en acercar a nuestros alumnos/as al concepto de patrimonio desde el punto de vista de las fuentes orales. Como profesores/as, introducimos la literatura oral para que el alumno/a se sintiera más cercano y cómodo ante el concepto de patrimonio, vinculado a unas características básicas: excepcional, monumental, estético, temporal, diverso, identitario y vivido/compartido (José Manuel Cuenca). Este último elemento ha permitido generar una serie de testimonios que nos acercan al concepto de vivencia, interiorización e identidad del concepto “patrimonio”, que han conducido al alumnado tanto a la mejor comprensión del concepto, como a la consideración de porqué el instituto es un recurso patrimonial, al igual que el barrio. Sólo se valora aquello que se considera propio y configura la identidad como persona, como pueblo, como país. Esta selección de testimonios así lo confirma.

 

Selección de fragmentos de los testimonios de los profesores/as realizada por los alumnos de 3º de PMAR 

 

ADELAIDA CÓRDOBA

Selección de Cristian Sánchez y Francisco Javier Almazán

“Sé que ocurrió así puesto que mi tía, siendo muy jovencita pudo ver cómo sacaban a la Virgen [de las Angustias] de su templo; ante aquella escena comenzó a gritar pero poco pudo hacer. Desde entonces, la gente del barrio vivió con pena la falta de su Virgen, de su identidad, de su patrimonio. Se resignaron a visitarla en otro lugar, el que no le correspondía y al que no consideraban su casa (…)  Esta es mi experiencia con un bien patrimonial, como os he comentado más allá del fervor, la creencia, la religión. Cuando visito esta iglesia y contemplo esta Virgen puedo ver la lucha de un barrio por conseguir un objetivo, una lucha de años sin caer en el olvido pero sobre todo, la lucha de no perder su identidad.”

 

MARCOS CAÑAS

Selección de Miguel Ángel Gordo y Miriam Roldán

“Lo primero que me llamaba la atención de esa zona era que muchos lugares tenían nombre de pintores o arquitectos (Pintor Torrado, Reinoso, Monserrat, etc.). Así sucedía incluso con mi nuevo colegio, que seguro muchos de vostr@s conocéis por haber estudiado allí: el Hernán Ruiz (…) El cambio al instituto parecía ser una exigencia más, como si estuviéramos en un proceso de cambio que marcaba alguna especie de transformación, aunque seguíamos siendo muy niños. Al menos así lo veía yo (…)  Y sí, digo San Álvaro porque para muchas de nuestras familias en aquel tiempo era difícil acostumbrarse al nuevo nombre: el que fuera un antiguo colegio se convirtió en el I.E.S. “Grupo Cántico” a partir del año 2.000 (…)  Volvería al Grupo Cántico con otros compañeros de prácticas para empezar a aprender a ser profesores. ¡No os podéis ni imaginar qué sensación tan curiosa era volver a estas aulas desde el otro lado! Lo cierto es que lo vi muy mejorado, con más recursos que en aquellos primeros años, si bien lo mejor era reencontrarse con antiguos profes que nos habían dado clase y vernos reflejados en varios de los muchachos y muchachas sentados en los que fueron nuestros sitios.” 

 

RAFAEL GONZÁLEZ

Selección de Soledad Caballero y Yenci Noelia García

“Nuestros padres prácticamente estaban todo el día trabajando, y cuando volvían del curro se metían en la taberna hasta las tantas. Casi todos sus oficios eran manuales: carpinteros, albañiles, comerciantes… Yo casi no veía a mi padre, salvo cuando me llevaba con él a trabajar. Nuestra educación estaba en manos de nuestras madres, de nuestras queridas madres a las que volvíamos locas con nuestras travesuras. Nos levantaban por la mañana, nos llevaban al cole, nos recogían, nos daban de comer, nos volvían a llevar al cole, nos volvían a recoger, nos daban la merienda, nos dejaban jugar, nos ayudaban en las tareas, nos lavaban, nos daban de cenar y nos despedían el día con el más dulce de los besos (…) La ciudad de Córdoba para nosotros era un misterio, porque prácticamente no la pisábamos, como no fuera para la feria de mayo en la Victoria o la feria de septiembre en la Fuensanta. Además, estaba muy lejos, tanto que decíamos que era ir a Córdoba. Para mí, como niño pequeño era una cueva llena de misterios, secretos y curiosidades. Éramos pobres, pero dignos. Y la parroquia era la institución encargada de ocupar el papel que debieran ocupar las instituciones públicas, muy especialmente en los temas relacionados con la cultura. Nunca he creído ni nunca creeré, pero como casi toda mi generación, me vi obligado a asistir a clases de religión católica, hacer la primera comunión y demás festividades cristianas. Pero, como cucos que son los curas, tenían algunas actividades a las que todos podíamos acudir. Una muy concreta llamó la atención de mis padres, “Visitas culturales”

 

ISABEL ALIJO

Selección de Isaac Cerrillo y José Luis Hernando

“HABÍA UNA VEZ… 

Podría preguntarme por qué es esa expresión tan significativa para mí. ¿Qué evocan esas tres palabras? ¿Qué tienen de mágicas? La respuesta no tarda en aparecer. Ambas engloban dos conceptos que, desde mi punto de vista, son muy importantes para todos nosotros y que debemos mimar como un tesoro precioso y preciado. Simbolizan PATRIMONIO y MEMORIA COLECTIVA (…)  Cada vez que escucho las palabras HABÍA UNA VEZ algo muta dentro de mí. Rápidamente mi “cuerpo y alma” se preparan para adentrarse en un mundo maravilloso, el mundo de la narración oral.  Desde que tengo recuerdos, éstos vienen asociados a las historias que me han contado mis abuelos, mis padres, amigos, profesores, etc. Y esas historias me han configurado y me han ayudado a ser quien soy. En parte, es por eso que a mí me encanta escuchar. A través de la escucha activa se aprenden universos nuevos y a través de la narración se ordena y coloca uno en el mundo (…) “Y a pesar de todo esto que os estoy contando, no puedo recordar mi primer cuento. Pero sí la sensación de estar en los brazos de mi abuelo paterno, que a pesar de ser un maestro de escuela bastante serio, guardaba para sus nietos momentos de ensueño en los que las palabras cobraban todo el protagonismo. Nos contaba cuentos y luego nos traía su raído diccionario y nos decía que ahí estaban todas las palabras del mundo y que, bien trabadas, podrían construir infinitas aventuras. Siempre me maravilló su constancia con su estudio del diccionario. ¿Podéis creeros que se lo sabía de memoria? A veces me pedía que le preguntase cualquier palabra al azar para repasar. A mis hermanos y a mí nos maravillaba. Y a nuestros amigos les costaba creernos. Cuando fuimos lo suficientemente mayores para tener unos ahorrillos le compramos para Reyes un diccionario nuevo. Nunca jamás suplantó a su viejo y raído compañero, pero nos lo agradeció muchísimo”

 

JAVIER ARIAS

Selección de Fátima Maidem

“No fue hasta que volví de una estancia de tres meses en Lisboa (una ciudad maravillosa de la  que podríamos hablar otro día) que me di cuenta de lo realmente bonita que luce la Mezquita bien iluminada por la noche o el Alcázar. En ocasiones, necesitamos echar un poco de menos nuestro patrimonio para redescubrir.”

Selección de fragmentos de los testimonios de los alumnos/as de 3º de PMAR  realizada por los profesores/a

Francisco Javier Almazán

“Hace varios años más o menos en el 2010 cuando estaba en Córdoba me dijeron que íbamos a visitar un sitio muy chulo. Al principio pensé que no me iba a gustar mucho ese sitio y que iba hacer algo aburrido. Al llegar a ese sitio, desde lejos se podía ver porque era super alto; pero yo seguía diciendo que era algo aburrido hasta que entramos a ese lugar.  Al final acabé flipando, ya que estaba en la mezquita. Había un patio super chulo y super grande y varias fuentes que me llamaron la atención y había muchos árboles, pero al pasar el rato en ese sitio me empecé a aburrir.  Pero mi padre me dijo que le siguiera y había un sitio dentro de la mezquita que era una sala que al entrar había muchos arcos con columnas”

 

Miriam Roldán

“Todavía me acuerdo bien del día que fui de excursión a Medina Azahara en primaria, quinto exactamente. Fue un día lleno de diversión y sobre todo curiosidades porque era la primera vez que iba a ese lugar con mis profesores y compañeros de clase. Contaban que Medina Azahara era una ciudad que mandó el primer califa de Córdoba  a construir y estaba construida a unos 8 km de Córdoba capital. Me llamó mucho la atención la historia que había en ese lugar antiguamente, los videos que nos ponían representando la ciudad. En ese momento no pensaba que aquello podía significar patrimonio, aunque a lo mejor escuché la palabra, pero a día de hoy que lo hemos estudiado más a fondo sé que lo que vi aquel día es patrimonio, ya que se ve que es una parte de la ciudad muy importante”

 

Fátima Maidem

“Salimos de Arcila por la noche para llegar a Casablanca por la mañana para rezar en la mezquita. Cuando entramos a la mezquita todo era por dentro precioso. Me encantó, era todo grandísimo. Al llegar la hora de rezar se oía la oración, espectacular.  La gente super educada, generosa, etc.  Había mujeres dándonos la bienvenida. Cuando terminamos fuimos a desayunar por ahí, a  un café junto a la playa”

 

Miguel Ángel Gordo

“Lo primero que vi o sentí como Patrimonio fue mi paso de semana santa,  que es La Paz y Esperanza, pero lo que más me motivó fue el Cristo de la Humildad y Paciencia. Estaba muy bien cuidado con detalles que jamás había visto, por eso decidí un día  ser hermano de esa hermandad que me llamaba la atención, cuando lo veía el miércoles santo. Y recuerdo perfectamente ese día; era un martes del 2016 que fue mi primer año en salir y recuerdo perfectamente que a mitad del camino me empezó a doler la cabeza porque era mi primer día. Y ahora os voy a dejar una foto de mi Cristo y de la Virgen. Yo pienso que ese paso es uno de los mejores de Córdoba. Y estoy orgulloso de que esta hermandad salga el miércoles santo. Y me trae felicidad”

 

Ruth Jiménez

“Para mí es el cante flamenco o cante gitano no es solo un patrimonio para nosotros, ya que también nos vinculamos y a través de ahí expresamos nuestras emociones.  Y os preguntaréis por qué al cantar nos emocionamos y la razón por la que le ponemos tantas ganas y sentimos  lo que contamos. Y no sólo eso sino que también contamos historias que no han sucedido tiempo atrás o hace poco, y muchas de ellas la cantamos como si fuera una historia llena de sentimientos, por ejemplo nuestras penas, las risas, el amor o cuando nos enamoramos, o fracasamos. Muchas de nuestras canciones, coplas o cantes muestran sentimientos de nuestras familias que más queremos, y también cantamos canciones dedicadas para alguien especial. Todos los cantes  los dedicamos hacías nuestras familias y amigos y para todo el mundo para que nos oiga  y poder liberarnos de nuestras emociones”

 

Soledad Córdoba

“La primera vez que descubrí el patrimonio fue a través de las historias que mi abuelo me contaba siempre.  A mí esas charlas siempre me gustaban mucho porque me contaba muchas cosas interesantes y divertidas de cuando él era un crío. Él siempre me contaba lo que vivió en la mili y, aunque a veces pudiera llegar a verse pesado, a mí esas historias que él me contaba me daban vida, también siempre me contaba cuentos los cuales a él se lo leía a él sus abuelos”

 

Yenci García

“Recuerdo que la primera vez que conecte con la palabra patrimonio fue cuando viaje desde mi país hasta donde estoy desde ese momento en el que ingrese en España esa primera vez que salí a descubrir la maravillas que guardaba y que estaban por ser descubiertas; lo recuerdo tan bien que lo guardo como un bonito recuerdo, ese recuerdo que de mi cabeza no se va fue el día en que visite el zoo, la sensación de poder tocar y ver los animales, sentir el ambiente de las personas de mi alrededor, saber que no soy la única persona”

 

José Luis Hernando

“Todavía me acuerdo de ese día ese día en que por primera vez fui a ver Medina Azahara. Recuerdo  perfectamente de las sensaciones que tuve cuando llegué al lugar. Tendría como unos 11 o 12 años. Cuando me subí al autobús estaba super nervioso y emocionado, cuando por fin después de unos minutos inquietos logramos entrar. El paisaje tanto del lugar como de las afueras del recinto era espectacular porque era un día de primavera donde no hacía ni calor ni frío. Los aromas eran naturales y frescos. Una de las mayores sensaciones que tengo al visitar Medina Azahara es de tranquilidad e interés, ya que el lugar es muy bonito y relajante. Para mí este lugar es patrimonio porque desde pequeño me ha gustado mucho y el lugar está situado en una buena zona ya que está al lado del campo y visitarlo es una pasada porque no hay ruidos de coches y los animales y el color verde de la naturaleza le dan unas sensaciones , que no he podido olvidar todavía. Una de las cosas que aprendí y que a día de hoy me acuerdo es de los agujeros de donde estaban antiguamente las puertas. Otra de las cosas que me gustan más sobre Medina Azahara es el horno donde hacían el pan, ya que todo el lugar está muy bien conservado”

 






Como podéis comprobar, el mayor recurso patrimonial de nuestro centro son sus alumnas y alumnos.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Una nueva aventura: "Vivir y sentir el patrimonio"

"Todo se transforma"

 Hola a todos y todas. Vamos a realizar una entrada de un proyecto que estamos realizando en el centro desde hace aproximadamente cuatro cur...